Francis Bacon - Inocencio X |
Anticlericalismo: "Doctrina o procedimiento contra el clericalismo"
Clericalismo: "Influencia excesiva del clero en los asuntos políticos"
no se trata tanto de estar "contra la Iglesia" como contra la ingerencia de esta en la vida pública de un país. Es decir, no se trata de una postura contra los creyentes ni tan siquiera contra el libre ejercicio del "sagrado" ministerio eclesial entre sus fieles e incluso entre la sociedad en general -eso que se conoce como proselitismno- , si no contra la inveterada costumbre que en algunas países, España por ejemplo, tiene la Iglesia Católica para intervenir en los asuntos públicos.
La masonería no está en contra de ninguna religión, de hecho admite en su seno -como por otra parte no podría ser de otra manera- a personas de cualquier creencia o sin ella ("Le Droit Humain está compuesto por Francmasones, hombres y mujeres fraternalmente unidos, sin distinción de orden racial, étnico, filosófico o religioso") 1 lo que no es más que una demostración de algo consustancial a la francmasonería, la tolerancia.
Parece evidente que cualquier persona sensata, que piense que las cuestiones religiosas únicamente tiene que ver con lo más íntimo del ser humano, se declarará anticlerical en el mismo momento en el que advierta que una iglesia, cualquier iglesia incluso la suya, se adentre en los dominios de lo público con intención de imponer sus criterios a la generalidad de la sociedad. Es decir, cualquier persona que entienda que la sociedad debe ser laica será un anticlerical por la simple razón de que estará en contra de la influencia excesiva del clero en los asuntos políticos, con lo que el anticlericalismo sería, en realidad, una apuesta por el respeto a la intimidad en un aspecto tan sensible como el que compete a las creencias y a la relación del ser humano con cualquier especie de "Ser Supremo" organizador del universo.
Parece pues razonable, dicho lo anterior, pensar que laicismo y anticlericalismo son sinónimos de algo tan simple como pedirle a las confesiones religiosas que se mantengan dentro del ámbito en el que deben moverse y es el que atañe a las cosas del espíritu y, por tanto, en un ámbito estrictamente privado. Esta privacidad no es óbice para que, dentro de los límites que marcan las leyes civiles para cualquier tipo de manifestaciones, lleve a cabo cuantas acciones considere convenientes para el mejor servicio a sus fieles y que se recogen en nuestro ordenamiento legal dentro del marco de la libertad de manifestación.
Quizás se nos entienda mejor si traemos a colación algún ejemplo, parece bastante extendida la idea de que la preeminencia del islamismo en algunas sociedades es algo reprobable, esto es anticlericalismo islamista aunque para algunas personas no sea más que la expresión de un rechazo a costumbres o modos de entender la sociedad que chocan con nuestra visión de lo que esta debe ser. Nadie se extraña de este tipo de anticlericalismo nos parece normal y, además, no se ve como tal si no como el rechazo a una determinada manera de entender la organización social. Quienes entendemos lo mismo con respecto a la ingerencia de la Iglesia Católica en la vida social española no somos diferentes a quienes piensan lo expuesto sobre el Islam.
Todos podemos ser anticlericales -de hecho lo somos como hemos visto- , lo que debemos es serlo con todas las consecuencias, siempre y no de manera selectiva según lo que pensamos que son los verdaderos valores de una sociedad, los nuestros y nuestra sociedad que pueden no ser la más perfecta obviamente.
He dicho
1 Constitución Internacional de la Orden Masónica Mixta Internacional Le Droit Humain-El Derecho Humano
3 comentarios:
Calurosa batería de aclamación.
Qué alegría leer algo tan bien explicado.
TAF. Ricardo
Me uno a lo que han opinado Sinuhe y s2r3a
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